EUBIA organizó la mesa redonda Transformación del Aceite Usado de Cocina en Biodiésel 2030 - de residuo a recurso. El evento tuvo lugar el pasado 3 de Marzo de 2015 con el apoyo de los socios del Proyecto RecOil. Representantes de instituciones de la Unión Europea, ONGs, de la industria y medios de comunicación tuvieron la oportunidad de debatir acerca de las barreras y oportunidades que encuentra el mercado del biodiésel producido a partir de aceites usados de cocina (UCO).

 

 

 

El evento fue abierto por el oficial del proyecto RecOil, Emilio Font de Mora (EASME). Orlando Paraíba (ENA), coordinador del proyecto, dió un breve repaso a los principales logros y resultados obtenidos por RecOil, destacando como crucial la participación de los ciudadanos y las autoridades locales para el correcto funcionamiento de los sistemas de recogida de aceite. También presentó la Guía Online desarrollada en el marco del proyecto.

 

Juan Elías Vergara Míguez (EUBIA) repasó el marco normativo, señalando aquellas políticas sobre biocombustibles y residuos que afectan directamente al desarrollo del biodiésel producido a partir de UCO en Europa.

 

Más tarde, el debate se abrió en una mesa redonda moderada por el profesor Theocharis Tsoutsos (Technical University of Crete) en la que se trataron temas como la Directiva ILUC y la política de biocombustibles posterior a 2020, la necesidad de un sistema de certificación o los incentivos nacionales al uso de UCO para producir biodiésel.

 

A pesar de los costes de recogida y transporte, el UCO es una materia prima relativamente barata. Además, su proceso de transformación no requiere de una tecnología especialmente avanzada, ni tampoco tiene un coste elevado. Es por esto por lo que la última versión de la Directiva ILUC aprobada por el Parlamento Europeo (Febrero 2015) no incluye el biodiésel procedente de UCO entre la lista de biocombustibles avanzados, a pesar de que el UCO es una materia prima elegible para el doble cómputo en relación al objetivo de reducción del 10% de emisiones de CO2 en 2020.

 

De acuerdo con la Directiva de Calidad de Combustibles, es necesario apoyar el empleo de aceite usado de cocina por su gran capacidad para evitar emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera. Eliminar las subvenciones a los biocombustibles de primera generación constituiría una de las principales medidas de apoyo a los biocombustibles basados en residuos tras 2020. En los últimos años, la Comisión Europea ha estado muy interesada en el desarrollo de la cadena de transformación de UCO a biodiésel. De hecho, ha cofinanciado varios proyectos con este objetivo (p.e. CIVITAS). Algunos de estos proyectos han sido reconocidos como buenas prácticas a nivel europeo, y demuestran que la producción local de biodiesel a partir de UCO es una solución sostenible, viable y rentable para el transporte público.

 

Por otra parte, la coordinación de políticas e iniciativas de apoyo al mercado de los biocombustibles está pasando del plano europeo al nacional. Consecuentemente, las autoridades nacionales y locales jugarán un papel decisivo en el desarrollo de normas adecuadas que potencien la gestión del UCO, eliminando los contrastes existentes con la regulación de subproductos animales.

 

El tercer artículo de la Directiva de Combustibles Alternativos reconoce el importante papel de los biocombustibles avanzados, fundamentando el desarrollo de los objetivos nacionales en la disponibilidad de información actualizada y fiable, análisis y proyecciones de futuro. Las autoridades nacionales de la Europa de los 28 deberían jugar un papel principal en la distribución de incentivos para los biocombustibles avanzados de manera adecuada para el medio ambiente y las economías locales.

 

Los esquemas de certificación voluntarios adaptados a los biocombustibles obtenidos de residuos han sido capaces de hacer frente a los robos de aceite y riesgos de fraude. Actualmente, una de las principales barreras a superar es la escasa concienciación sobre los impactos ambientales, económicos y sociales del UCO. Desafortunadamente, la mayor parte de los ciudadanos y autoridades de la Unión Europea no son conscientes de los beneficios que conlleva el desarrollo de la cadena de transformación de UCO a biodiésel debido a la escasa visibilidad y presencia en el debate público. En este sentido, apoyar al UCO requiere de un gran esfuerzo para su promoción y concienciación.

 

Otro obstáculo es la falta de datos y estadísticas fiables sobre el UCO. 

 

En los siguientes enlaces podrá descargar las presentaciones del evento en formato .pdf: 

 

 

 

Fuente: EUBIA